La hípica en un deporte, lleno de sorpresas, incidentes y hechos que en la mayoría de casos, quedan guardados en nuestra memoria y que muy difícil se pueden olvidar.
Nos trasladamos al año 1969 y se disputaba el clásico Demetrio Velásquez, un evento donde realizaba su segunda carrera El Forastero (Tehuelche-Kiska), argentino que defendía al stud El Inmortal y que preparaba Filiberto Medina.
El castaño venía de llegar segundo en su debut a 2 ½ cuerpos de Rey Del Mar y enfrentaba esta vez a Durst, que se había convertido en mal partidor, Colector que igualmente venía de hacer su debut, Domeck que con sus cuatro últimos placés consecutivos, era considerada como el cierre de la reunión y finalmente a Puntero, que lejos de hacer honor a su nombre, era un experto en quedarse en la partida, por lo que fue considerado en descarte.
EL FORASTERO
No obstante su auspicioso debut, El Forastero fue considerado como el menos favorito, ya que tenía jugados 360 boletos a ganador de un total de 2 730, pues nadie pensó que daría el salto de correr en su debut la distancia de 1200 metros y ahora 1600.
El hijo de Tehuelche, no solo se dio el lujo de vencer de punta a punta y abrumar a sus rivales; sino que dio claras muestras que se trataba de un ejemplar realmente corredor y que tranquilamente podría alternar con éxito, frente a ejemplares de primer nivel como eran en ese entonces, Curtidor, Brandy Lord, Mike Hammer, Miss Teresina, Palmito, Bono Boy, Scott, etc.
LA CARRERA
El triunfo del argentino fue holgado, el favorito Domeck, volvió a quedar segundo a 11 cuerpos, Colector a 18 y fuera de poste Durst y Puntero, que nuevamente perdieron toda opción al quedarse en las huinchas.
El tiempo fue bueno 1´48”3, lo que abría esperanzas de enfrentar a este rácer con ejemplares de calidad.
SU FUTURO
Lastimosamente no tuvo, pues en una mañana de aprontes, el castaño de El Inmortal, se estrelló contra la baranda, quedando prácticamente atravesado por la misma, perdiendo la vida instantáneamente.
Para colmo de males y lo que hace la profesión de jockey muy peligrosa, con el accidente de El Forastero, falleció su jockey Romualdo Quilla, quien salió volando del ejemplar con tan mala suerte que fue de cabeza a una piedra, quedando inerte.
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