La novena carrera del día sábado en Monterrico tuvo como ganador a un ejemplar que en los 250 metros finales parecía una máquina o que recién partía en el evento. Fue el potro Chispeao que con el chileno Héctor Berríos demolió a sus rivales en los ultimos tramos. Corrió quinto gran parte de la carrera; faltando 600 quedó sétimo adelantando solo a Mar de Copas, encontró tráfico en la recta y cuando halló el claro suficiente, desarrolló una violenta atropellada que hizo delirar al público, que a media recta parecía que aplaudiría a Mago Feliz por haberse disparado cuatro cuerpos; pero el conducido por Padilla, no pudo contener al hijo de Sharaf que se comía la cancha como todo un campeón.
El tiempo de 2´02”3, no fue nada espectacular, pero fue mejor que el que marcaron Magollo en la primera (2´02”4) y Cubillas en la cuarta (2´03”0).
Chispeao es un hijo de Sharif y Estage Exit, por tanto hermano por línea materna del buen Dushanbe, defiende al stud El Castillo, lo presentó en gran estado Félix Banda y lo condujo muy bien Héctor Berríos.
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