Si no ocurre el “efecto
Segura”, Querendón no debe tener ningún problema para ganar el
clásico “Eduardo Benavides Arévalo”, a llevarse a cabo como
base de cuádruple en el Hipódromo de Arequipa.
El hijo de Quintillón
que ha sido sometido a una fuerte campaña de altura, debe hacer su
juego en punta y derrotar sin mayor apremio a El Coco y El
Intransigente que serán sus únicos rivales.
Llama la atención la
presencia de Armando Torres en la silla de El Coco. El hijo de Miguel
Torres fue un gran jockey hace muchos años atrás en el Hipódromo
de Porongoche y dejó la conducción por el peso, pasando
posteriormente a ser preparador; sin embargo, la falta de jinetes en
el recinto deportivo local, animó a que tome nuevamente la fusta y
dirija a uno de sus preparados.
Habrá que ver como lo
hace si siempre persiste en guiar al hijo de Play The Gold.
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