Se habla que la
pista de Monterrico está liviana y por ello los buenos registros marcados por
los juveniles nacionales la última semana; pero lo interesante de los mismo no
solo es la marca registrada; sino la forma como obtuvieron el triunfo.
Foque (Pegasus Wind – Sweet Destiny) fornido pupilo de Sabino Arias que de
partida impuso condiciones y en los metros finales se fue separando con tal
facilidad que muy bien pudo bajar los 57”, pero Salazar lo trajo muy
contemplado, como quien dice guardando máquina, pues para que apurarlo si la
diferencia de cuerpos era tan grande que no había necesidad de exigir a este
buen defensor del stud Altamar que promete a futuro.
Cetrina (Riyadian – Ole Pegasus) La potranca impuso un tiempazo que muy pocos ejemplares lo ponen en su debut. 0´56”98 es para una carrera de velocidad frente a los especialistas de la recta. Y Cetrina lo marcó corriendo como una saeta; no importó que de partida hiciera un amaño y se fuera contra Jealiva a la cual dicho sea de paso dejó parada, se recompuso rápidamente, su jinete hizo el cambio respectivo y con tranco demoledor superó a sus rivales en clara demostración de superioridad.
Si hablamos de
los machos Mañosín Syrus y Manuelito demostraron ser muy parejos y en las
hembras es bueno citar los nombres de Carolina y Cetrina en especial esta
última que en los tramos finales se comía la cancha.
En fin, fueron
dos clásicos muy interesantes donde ganaron dos buenos productos; pero los
propietarios de los ejemplares perdedores no deben desanimarse ya que los
equinos ganadores de El Estreno e
Iniciación, pocas veces o por lo menos en los últimos años llegan a ganar el Derby; eso sí, se convierten en
grandes velocistas. ¿Este año será diferente?
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